Este curioso e increíble switch de 1.8 centímetros es colocado en el escroto (con anestesia local y por un médico o enfermera especializada) en una muy sencilla operación de 30 minutos, con el fin de evitar que la esperma llegue al pene, lo que permite al hombre decidir, en un momento dado y preciso, si quiere concebir un hijo o no, con sólo presionar un botón. Este peculiar dispositivo llamado Bimek, en honor a su creador, se coloca en su lugar y su función es evitar que el esperma abandone los testículos para mezclarse con el líquido seminal, que juntos conforman el semen. Esto significa que la eyaculación se llevaba a cabo – con todo su placer -totalmente normal, pero sin espermatozoides incluidos.
Los creadores del “ interruptor de semen” Bimek SLV advierten que, tras la inclusión del dispositivo, el hombre debe esperar un tiempo prudencial de 3 a 6 meses, con el fin de deshacerse de todo vestigio de esperma en las glándulas seminales o en la próstata, por lo que las parejas, durante este tiempo deberán usar un anticonceptivo adicional o extra. El doctor Bimek apunto con cautela, que hasta el momento sólo ha probado este invento muy útil en sí mismo, pero se espera que en los próximos días inicien las pruebas clínicas en 25 hombres que se han prestado para esta prueba inicial.
La compañía creadora del switch aseguro que el dispositivo podría salir al público, a modo comercial, en el año 2018, pues aparte de las pruebas aún necesita inversión, para ajustar algunos detalles y terminar de perfeccionar el artilugio anti conceptivo, cuya sorprendente ventaja, es que no es permanente como la conocida y temida vasectomía que se realiza en la actualidad. Habrá que esperar un poco para probarlo.